viernes, 21 de junio de 2013

Leyenda roja

No hay que subestimar nunca la importancia del contexto: dos moscovitas heterosexuales saludándose al ruso modo pasarían desapercibidos en Chueca. El contexto explica también que el progresismo crea que Juan XXIII es uno de los suyos. Que yo sepa no hizo la tesina sobre el asalto al palacio de invierno, pero el contexto, los sesenta, apuntala la leyenda roja según la cual desciende directamente de La madre, de Gorki, y del abuelo fue picador, de Víctor.
A Francisco, por su predilección por el desvalido, también le buscan acomodo en la Revolución Rusa, cuando está claro que una cosa es la dictadura del proletariado y otra el obrero de la mies. Un Papa que no se cansa de repetir que Dios no se cansa de perdonar no encaja en una ideología que para imponer su modelo de hombre nuevo convirtió en cárcel la mitad del viejo continente.
A pesar de lo cual el progresismo insiste en que este vicario le pertenece. De ahí que todavía no haya iniciado la persecución preceptiva del sucesor de Pedro. Todavía. Pronto lo azotarán con el latiguillo que emplearon con Juan Pablo II: avanzado en lo social y conservador en lo doctrinal.  Lo que es un error. Otro más. El progresismo no entiende que interpretar la fe sin tenerla es más difícil que encontrar, no ya una aguja en un pajar, sino una brizna en un taller de costura.

2 comentarios:

  1. Ya le deben estar encargando el traje estilo Mao al Papa Francisco,Javier;sin darse cuenta que el nuevo pontífice viste años ha la sotana negra de la Compañía de Jesús. S.Ignacio tuvo buen cuidado en vestir a sus hijos al modo sencillo de los sacerdotes de la época,así que el sastre rojo puede que se quede sin cobrar...
    Un abrazo.

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  2. Ese traje no le viene bien a nadie. Un abrazo.

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