Los tiempos del Verbo en la red

Si desde Santa Teresa tres palabras -sólo Dios basta- condensan el mensaje divino, 140 dan ahora de sobra para declinar el Verbo en sus tres tiempos: Génesis, Nacimiento y Parusía. De modo que twitter, bien utilizado, es el vehículo perfecto para evangelizar mediante la síntesis, presente en el catolicismo desde que Jesucristo aclaró que los Diez Mandamientos se cierran en dos.
El Papa escritor ha entendido bien el poder de la red para desgracia de quienes, por el trabajo que le da a la imprenta, le consideran un epígono de los viejos tiempos. Quienes le toman por un anciano que cree que la pluma Parker es lo último en nuevas tecnologías de la comunicación se han topado con un vicario que no tiene miedo a utilizar el teclado para debatir sobre Tierra Santa en tierra hostil.
La cuenta abierta por Benedicto XVI en esta aplicación de internet no trata de sustituir el método tradicional de predicar a través del púlpito, pero complementa la acción misionera de la Iglesia en un campo minado, donde es constante el escarnio a Su Santidad, a quien, a la vista está, no le asusta que le echen arena en los ojos los que espiritualmente son ciegos de nacimiento.