Esto le pasa a Martí por otorgar a las manifestaciones
públicas de fe categoría de tradición popular. Del mismo modo que la sardana no
es la variante catalana del corro de la patata, aunque lo parece, la misa en
honor de la Patrona no es una costumbre apuntalada en la oración sino una oración
enhebrada al ADN barcelonés. El presidente del PSC debería de saber que no es coherente considerar anticuado al Concilio de Trento y creer que en la próxima pasarela Gaudí desfilará el congreso de Suresnes porque aún parte la pana.
jueves, 26 de septiembre de 2013
La Virgen no es chica Almodóvar
Un político español que marca distancias con el catolicismo
porque lo considera anacrónico es como un padre de familia que no se habla con
el hijo mayor porque lleva corbata en vez del pelo largo. Empecinado en este
error está el máximo dirigente socialista del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi
Martí, que no ha asistido a la misa de la Merced, Patrona de la ciudad, porque
entiende que la ceremonia está desfasada, de lo que se deduce que para no
estarlo la Virgen María
debería postularse ya mismo como chica Almodóvar.
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Muchos católicos tenemos a la Madre de Dios orgullosamente en nuestro corazón. Ella nos escucha,consuela y reconforta. Por eso mismo,lo que este caballerete de medio pelo piense me deja bastante frío. Dicho esto,¡qué verdad es aquello de no echéis margaritas a los cerdos!...
ResponderEliminarUn abrazo.