Jesús propuso a los apóstoles que no llevaran sandalias para
el itinerario de la
evangelización. Era su modo de decirles que Dios proveerá,
pero también de enseñarles que la austeridad forma parte del genotipo de la Iglesia. Lo que explica
la visita del Papa al garaje vaticano para inspeccionar el caballaje de un
parque móvil en el que, rodeado de purasangres, un Ford Focus ejerce de arre
borriquito.
A Francisco le gusta este modelo porque cuadra con su carácter
de hombre de zapatos gastados, de argentino de bonobús. De ahí que lo haya elegido
para transitar por Roma. Da a entender así que aunque el canto gregoriano no está
reñido con el MP3 de serie es bueno predicar con el ejemplo en el ámbito de los
frenos de disco.
Algunos pondrán el grito en el cielo al ver al Papa en un modesto utilitario sin recordar que el Señor, a lo más que llegó fue a un humilde rucio...
ResponderEliminarSí,vuelve a ser importante patearse los caminos,Javier.
Un abrazo.
A mí me gusta que el Papa haga estas cosas. Un abrazo.
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